martes, 26 de agosto de 2008

La escriba


Cuando acabé de leer "La catedral del mar" me juré a mí mismo no volver a leer más novela "histórica", todavía no me explico el porqué del éxito de aquella novela. Pero he aquí, que hace unos días, leí unas magníficas reseñas sobre esta novela y me dije, pues por que no te la lees?. Dicho y hecho , y estas son mis impresiones:
Todas estas novelas, llamadas históricas, no son más que novelas de aventuras ambientadas en una época más o menos lejana, en la que se mezclan hechos históricos y personajes reales junto con otros totalmente imaginarios. Es un envoltorio perfecto para contar un montón de aventuras, amén de un enorme filón para las editoriales.
Esta novela no es una excepción. Eso sí, a pesar de sus casi 600 páginas es bastante entretenida , se lee fácilmente( yo tardé una semana en hacerlo) lo que ya es un mérito.
El problema comienza cuando analizamos el argumento, situaciones y personajes con algo más de profundidad.
Para empezar, la protagonista es una joven que domina el arte de la escritura, la lectura, el griego y el latín, aprendiz en un taller, vamos, no muy propio de una época donde las mujeres de esa edad estaban destinadas a criar niños y las labores del hogar.
Y por supuesto está de muy buen ver. No quiero desvelar más detalles sobre todo lo que le va sucediendo, por lo que sólo diré que en ocasiones hay que tener mucha fe o simplemente dejarse llevar, para creerse las.
Otro personaje es Alcuino de York, el cual realmente existió, y que aquí el autor nos lo dibuja como una especie de Sherlock Holmes de la época Carolingia. Parece un calco de Guillermo de Baskerville de "El nombre de La rosa".
La novela también tiene una trama policíaca, de investigación, que a cualquier lector habitual de novela negra o de misterio no le sorprenderá en demasía. Desde el principio se ven por dónde van los tiros y las sospechas de este lector más o menos avezado finalmente se ven confirmadas . Uno de los misterios que el autor nos plantea es conocer al personaje que lleva una serpiente tatuada. Reconozco que desde el principio sospeché de uno, que al final resultó ser él , pero el autor nos lo oculta hasta bien avanzado el libro, cuando por lógica tenía que haber sido descubierto mucho antes.
No puedo comentar más sin desvelar detalles de la novela por lo que acabaré refiriéndome al final del mismo: sencillamente es flojísimo.
Novela entretenida, para lectores poco exigentes, apta para la época veraniega , la playa o la piscina.

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